Ciudad de México, México, 30 de junio de 2018, México Ambiental.- El gobierno de México amplió por cinco años la vigencia del acuerdo que mantiene como zona de refugio pesquero la costa occidental de Baja California Sur, como una de las tantas medidas emergentes para proteger los recursos pesqueros y especies emblemáticas como la tortuga caguama o amarilla (Caretta caretta), que muere por asfixia debido a las redes agalleras tendidas en el mar.
Si bien la medida es adecuada, el problema más grave está en el norte del Mar de Cortés, en el Ato Golfo de California donde la vaquita marina (Phocoena sinus) la marsopa más pequeña del mundo, endémica del Alto Golfo de California está en camino a una extinción irreversible por la tibieza del gobierno de México y por la voracidad del mercado asiático que demanda la vejiga natatoria de la totoaba (Totoaba macdonaldi), una especie de curvina sometida a una presión excesiva de pesca que coloca a la población en una situación de riesgo evidente.
Así, para propiciar la conservación y desarrollo de los recursos pesqueros, así como proteger su reproducción, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), dictó este acuerdo, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) que mantiene también por el mismo período las medidas para reducir la posible interacción de la pesca con tortugas marinas que habitan en la mencionada región productiva de los mares mexicanos.
Esta medida se establece con base en estudios biológicos pesqueros realizados por el Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura (INAPESCA), en cuya Opinión Técnica recomienda la ampliación, por el tiempo requerido, del “Acuerdo por el que establece la zona de refugio pesquero y nuevas medidas para reducir la posible interacción de la pesca con tortugas marinas en la costa occidental de Baja California Sur”.
El acuerdo explica que algunas modalidades de pesca coinciden con la distribución temporal de varias especies de tortugas marinas, cuyas poblaciones se encuentran sujetas a protección desde hace varias décadas por parte del Gobierno de México, mediante un conjunto de programas y medidas dirigidas a su conservación, recuperación y propagación.
Refiere que la tortuga caguama o amarilla (Caretta caretta) es una especie de quelonio marino altamente migratoria, con un ciclo de vida complejo, que ocupa hábitats diversos, desde los exclusivamente oceánicos hasta los neríticos.
Los adultos realizan migraciones entre las playas de anidación y áreas de alimentación, asimismo, los juveniles de esta especie tienden a permanecer por largos periodos en las aguas oceánicas del Océano Pacífico Norte o en los ambientes neríticos de la Península de Baja California en México (zona marítima cercana a la costa, pero que no tiene contacto directo con el litoral, abarcando desde los 10 metros de profundidad hasta los 200 metros bajo nivel del mar)
En las pesquerías desarrolladas en las aguas marinas frente a la costa occidental de la Península de Baja California, se han aplicado regulaciones sobre las especies sujetas a aprovechamiento, artes y métodos de pesca, así como disposiciones específicas para la protección de las tortugas marinas; disposiciones que el Gobierno Federal, a través de la SAGARPA, ha venido actualizando mediante publicaciones en el Diario Oficial de la Federación, determina el texto.
El establecimiento de la zona de refugio, representa un conjunto de medidas de manejo complementarias para la conservación y al aprovechamiento sustentable de las especies de interés pesquero, así como de aquellas en régimen de protección especial.